El arquitecto y diseñador finlandés Alvar Aalto es reconocido como uno de los maestros del movimiento moderno. Curiosamente su pieza más afamada es un humilde taburete de sencilla construcción y economía de ideas que ha pasado a la historia como un ejemplo de diseño perfecto.
El taburete 60 es un diseño de 1933 que representa la quintaesencia del funcionalismo: apilable, originalmente con tres patas y con asiento circular. Su superficie es lo suficientemente amplia como para que se pueda utilizar también como mesita auxiliar.
En la curvatura de las patas con forma de L reside su carácter, que posteriormente pasó a ser la clave de todos sus diseños de muebles y que Aalto mismo consideró el mayor de sus logros en el diseño de mobiliario.
El taburete 60 se fabrica con patas en madera de abedul natural y con el asiento en laminado de abedul. Asimismo, se puede adquirir solo con color en el asiento en múltiples versiones: laminado en blanco, en linóleo negro o sencillamente lacado en blanco, negro, naranja, amarillo, verde y turquesa. Se sirve en plano y requiere montaje.
Uno de los grandes atractivos del taburete 60 es que es apilable y que, además, lo hace de una forma muy atractiva. Incluso, cuando está apilado en grupos, forma unas torres en espiral. El resultado es muy escultural y visualmente interesante.
El taburete 60 ha sido un bestseller desde que se empezó a producir en 1933. El precio asequible y la falta de espacio en los hogares contemporáneos han contribuido al éxito de esta pieza.
Se trata de un diseño que puede ser usado en cualquier estancia de la casa, desde el cuarto de baño al dormitorio, la cocina o el salón y, por ser ligero y fácil de transportar, se puede sacar al exterior sin problema.
Con el objetivo de producir sus diseños, Alvar Aalto fundó en 1935 junto a su mujer, Aino Marsio, la empresa de mobiliario que todavía hoy produce esta pieza: Artek.
